11 de febrero de 2024
Una de trámite para evitar la lluvia (que no llegó)
3 de mayo de 2022
Ruta de la colza 5.0
Como indica el título, es la quinta ocasión que realizamos la que denominamos "Ruta de la colza". En esas salidas, realizadas normalmente a finales de abril o primeros de mayo, procuramos recorrer zonas cercanas a la capital para disfrutar del amarillo de los campos sembrados de colza. La edición de este año ha sido distinta porque la mayoría de los bíkers estaban en Oporto, pero aún así había que hacerla antes de que esas flores pierdan su efímero esplendor.
27 de junio de 2021
La clasica hasta El Cubo, pero con novedades
Lo que empezó siendo una ruta larga como último entrenamiento para nuestra "gran ruta" ha terminado siendo una tradición. Hoy hemos cumplido con ella yendo hasta El Cubo de la Tierra del Vino, y además lo hemos hecho estrenando un nuevo tramo que nunca habíamos hecho. Lástima que se nos pegara un acompañante no invitado, el viento.
28 de marzo de 2021
Campos de colza por la Tierra del Vino
En los últimos años, a finales de marzo o principios de abril, muchos campos de la provincia se tiñen de amarillo. Aprovechando la explosión de verdor de los campos de cereales, se generan unas cuadrículas de contrastes, entre el amarillo y el verde, dignas de ver. Eso es lo que hemos hecho hoy, ir a su encuentro. Algo hemos visto, pero aún no está la colza en su máximo esplendor. Aún así, ha merecido la pena.
8 de noviembre de 2020
Por el corazón de la Tierra del Vino
eltiempo.es fue quien nos sugirió que hoy fuéramos hasta Peleas de Arriba. Bueno, exactamente no fue así, la verdad, sino que consultamos esa página web para saber la predicción meteorológica para el Domingo y la respuesta a esa consulta fue: sol y nubes, temperatura entre 9º y 12º, lluvia a partir de las 14:00 y viento del sur de 10 km/h. Este último dato es que nos hizo planear ir a Peleas, para así hacer el camino de ida con el viento de cara y la vuelta con él de popa.
12 de julio de 2020
Rodando hasta el Convento de Nª Sª del Soto
24 de noviembre de 2019
A Villanueva de Campeán, pese a las vallas
Partimos de la C.D. siete bíkers. Tras cruzar el Puente de Hierro, el barrio de Pinilla y pasar junto al cementerio, tomamos el camino de Morales, que seguimos hasta la ermita del Cristo, donde nos esperaba un bíker más.
4 de febrero de 2019
Incursión en Sayago
Nuestra intención era llegar hasta Cabañas, el primer pueblo de esa zona con el apellido de Sayago, pero antes había que atravesar una amplia zona de la Tierra del Vino.
1 de mayo de 2018
En busca de los campos de colza
Partimos de Zamora cinco bíkers. Cruzamos el puente de Cardenal Cisneros y nos dirigimos hacia la carretera de Moraleja.
Rodamos por ella un pequeño tramo y enseguida nos desviamos a la derecha por un camino que nos llevó a Morales del Vino.
En Morales cogimos el camino de Pontejos. Bordeamos esta localidad y poco después giramos a la derecha.
Tras llegar a esta localidad rodamos por sus calles y continuamos por un camino. Cruzamos la vía abandonada por un túnel y comenzó un pequeño ascenso.
Estando cerca de las antenas nos tentó el ascender hasta ellas y así lo hicimos, algunos mejor que otros. Desde allí las vistas, como siempre, son magníficas. Tras disfrutar de ellas y tomar un "algo".
Descendimos y volvimos a coger el track. Lo continuamos llegando a la carretera que une la N-630 con El Perdigón. Rodamos por ella hasta llegar al pueblo. Salimos de él y tras algún cambio de dirección cruzamos la carretera de Ledesma y proseguimos por la carretera que va desde esta a Tardobispo, aunque no llegamos a esta localidad.
Cambiamos totalmente de dirección y empezamos a enfilar hacia Zamora, llegando primero hasta cerca de Entrala, pasando después por el Brocal de las Promesas y siguiendo desde allí el GR-14 que nos llevó hasta San Frontis.
Desde este barrio nos "dejamos caer" hasta el río. Nos tentó tomar algo en "Los Pelambres" y no nos resistimos. Tras el piscolabis continuamos y tras cruzar el río por el Puente de Piedra y atravesar los Barrios Bajos, cada mochuelo se fue a su olivo.
Relive 'Morning May 1st'
15 de abril de 2018
Con barro, lluvia y viento... pero contentos
Ya los cinco, atravesamos Morales y giramos a la derecha por el Camino de El Perdigón. Lo abandonamos como un kilómetro después tomando la bifurcación de la izquierda.
Tras seguir por esta y algunos cambios de dirección terminamos en una rotonda de la autovía. La bordeamos y continuamos por un camino ascendente, el primero en el que barro empezó a pegarse, vuelta a vuelta, a la cubierta de nuestras ruedas. Nos costó horrores mover las bicis porque ese barro arcilloso nos pegaba al suelo. Fue como un kilómetro y medio. Tras él cambiamos de dirección y descendimos hasta la rotonda de Peleas de Abajo. Algunos se tomaron en serio la rotonda y dieron más de una vuelta a la misma.
Tras sobrepasar la cerámica giramos a la izquierda y poco después a la derecha, siguiendo así hasta casi la entrada de Corrales del Vino. Antes de las primeras casas nos dirigimos hacia las instalaciones de la Cerámica SAZA ya que el camino de Jambrina pasa por ellas. Descendimos por un camino ancho y de buen firme y comenzamos a ascender hacia el gran huerto solar que hay en esa zona.
Continuamos recto para después girar ligeramente a la izquierda para terminar llegando a la localidad de Peleas de Abajo.
Tras reponer fuerzas seguimos en perpendicular a la carretera llegando a una alameda próxima a Gema, desde allí continuamos prácticamente recto hasta las proximidades de Casaseca de las Chanas. Antes de llegar a esta localidad giramos a la izquierda y rodamos por un buen camino.
Más adelante cruzamos la carretera que une Morales y Arcenillas, continuamos y para evitar rodar por la carretera de Pontejos tomamos caminos alternativos. Uno de ellos nos volvió a llenar las ruedas del barro arcilloso y nos costó dios y ayuda salir de ese tramo.
Seguimos adelante en paralelo a la autovía y, después de realizar distintos cambios de dirección terminamos en la rotonda de Villaralbo y Moraleja, desde allí nos unimos al GR-14 hasta que llegamos al puente de Cardenal Cisneros.
Al llegar no nos quedó otro remedio que ir a la gasolinera a lavar las bicis porque traíamos del odiado barro arcilloso por todos lados.
Relive 'Morning Apr 15th'
16 de abril de 2017
El espactáculo de la colza en la Tierra del Vino
Allí se nos unió otro biker y continuamos, ya los cinco, hasta el propio Morales. Tras atravesar esta localidad giramos a la derecha para continuar por el llamado Camino El Perdigón que abandonamos más tarde para seguir por el denominado Camino Sampedro.
Tras algunos giros y siempre con perfil ascendente nos pusimos a los pies de las antenas que hay próximas a Casaseca de Campeán. No pudimos evitar la tentación e intentamos el ascenso, sólo uno de nosotros logró llegar hasta la cima sin poner pie a tierra, el resto, por pérdida de tracción o porque las fuerzas fallaron, no lo lograron.
Desde esa altura la vistas eran magníficas. Paramos unos minutos para hacer algunas fotos.
Enseguida nos subimos de nuevo a nuestras bicis e iniciamos el descenso.
Ya de nuevo a los pies de las antenas pero por la otra cara, tomamos dirección Corrales siguiendo un tramo que casi es un descenso continuo.
Ya en Corrales del Vino tuvimos que parar porque de nuevo un pinchazo vino a cortar nuestra marcha. Tras arreglarlo nos dirigimos hacia la Cerámica Saza, pasamos a su lado y continuamos recto hasta llegar a un enorme huerto solar. Lo bordeamos y seguimos rodando, en esta ocasión dirección Gema.
En este tramo hay algunos toboganes pero la tendencia es más descendente así que en pocos minutos pasamos cerca de esta localidad y proseguimos ahora con dirección a Casaseca de las Chanas, por muy buenos caminos, anchos y con buen firme.
Antes de entrar en esa localidad giramos a la izquierda y posteriormente cambiamos de sentidos en varias ocasiones, terminando pasando por las proximidades de Pontejos. Continuamos a muy buen ritmo hasta la carretera que une Morales con Arcenillas, al llegar a ella rodamos por ella hasta el cruce con la de Pontejos. Giramos a la derecha para seguir por esta durante algún kilómetro. Más adelante la abandonamos virando levemente a la derecha siguiendo en paralelo a la autovía durante algún kilómetro. Después de muchos zig-zags terminamos en la carretera de Moraleja. La cruzamos y nos dirigimos hacia el río. Al llegar a este lo cruzamos por el puente de Cardenal Cisneros.
Como llegamos a muy buena hora nos dio tiempo a ver llegar la procesión de la Resurrección. Además, como uno de los bikers carga con la Vírgen, tuvimos el honor de que la bailaran para nosotros.
2 de abril de 2017
Rodando hasta El Cubo de la Tierra del Vino
Madrugamos más que otros días y salimos de Zamora por el Puente de Hierro con dirección Salamanca. Pasado el cementerio cogimos el carril bici Zamora-Morales pero lo abandonamos en la rotonda del Cristo de Morales. En esos primeros kilómetros pasamos frío porque había habido helada y la temperatura estaba en torno a los tres grados. El sol se agradecía y se hacía necesario.
Pasamos junto a la ermita y continuamos por la vía de servicio primero y desde la rotonda posterior por el pequeño tramo de carretera que lleva hasta Morales del Vino.
Cruzamos esta localidad y seguimos por el llamado Camino de El Perdigón que más adelante abandonaríamos para virar ligeramente a la izquierda con intención de ir hacia Corrales del Vino. En esta zona comenzamos ya a ver los cultivos de colza, justamente empezando a florecer, y nos acompañarían hasta pasado Santa Clara de Avedillo.
Antes de llegar a Corrales del Vino tuvimos que ascender varios tesos suaves que, unidos al ascendente perfil que hay desde Zamora, hicieron que el frío despareciera por completo.
Tras pasar Corrales proseguimos hacia Santa Clara de Avedillo. Cruzamos bajo un viaducto de la A-66 y giramos a la derecha y poco después a la izquierda, para iniciar un ascenso durillo adornado con estupendas vistas de la zona.
De nuevo volvió a cambiar el paisaje y entramos en zona de caminos anchos en perfecto estado, enormes rectas y arbolado. Rodamos fuerte por ellos y pronto comenzamos a divisar El Cubo.
Poco después pisamos sus calles. Al llegar a un parque paramos para recuperar fuerzas.
La parada fue corta y enseguida nos subimos a nuestras bicis para continuar. Salimos de esta localidad y giramos a la izquierda para tomar la Vía de la Plata, que no abandonaríamos hasta las proximidades de Entrala.
No era necesario entrar a este pueblo pero lo hicimos para hidratarnos allí ya que un biker se separaba del grupo en ese punto (¡Y qué mejor modo de despedirlo!).
Tras la hidratación un nuevo componente se nos unió al grupo.
Retomamos la Vía de la Plata y rodando fuerte entramos en Zamora en pocos minutos, eso sí, justo a la entrada de San Frontis un bíker no sabemos cómo pero cayó al suelo. Afortunada y milagrosamente sin consecuencias.
Bonita ruta muy rodadora y con bonitos y variados paisajes.