El verano está a punto de tocar a su fin y quedó demostrado esta mañana, el cielo parecía más propio del otoño y la temperatura también, pero eso no impidió que disfrutáramos una vez más de los caminos sanabreses.
El verano está a punto de tocar a su fin y quedó demostrado esta mañana, el cielo parecía más propio del otoño y la temperatura también, pero eso no impidió que disfrutáramos una vez más de los caminos sanabreses.
Sanabria es una comarca amplia si tenemos en cuenta la Alta Sanabria, pero la parte más conocida no lo es tanto, de hecho hoy hemos ido desde Puebla de Sanabria a San Martín de Castañeda, realizando una ruta circular, y aún así el recorrido no ha llegado a cuarenta kilómetros.
Cuando se queda una espinita clavada lo mejor es quitárselo cuanto antes, y nosotros teníamos una desde hace unas semanas. Habíamos hecho una ruta por Sanabria que nos llevó hasta San Ciprián, pero por un contratiempo tuvimos que acortarla y modificarla variando por completo el track original que habíamos planificado. Ahora, tres semanas después lo hemos hecho, casi, casi, como lo teníamos previsto.
San Ciprián de Sanabria es una bonita localidad de la comarca que le da el apellido. Por si situación no todo el mundo la conoce, si bien en los últimos años recibe un buen número de visitas porque allí nace la ruta de senderismo que lleva a las Cascadas de Los Vados. En esta ocasión tuvimos la oportunidad de ve esta localidad desde una perspectiva distinta, desde lo alto. Nos costó llegar, pero nos encantó.
En este grupo hay una tradición veraniega, en concreto en agosto, que consiste en realizar una ruta en tierras de Sanabria y degustar después los típicos habones sanabreses. Este año no iba a ser menos, eso sí, tomando las precauciones debidas.
Los que se desplazaban desde Zamora madrugaron para realizar el viaje y estar en destino sobre las 10 de la mañana. Una vez descargadas las bicis y, tras realizar los preparativos, a las 10,15 aproximadamente iniciamos la ruta.
Teníamos previsto un recorrido pero finalmente, asesorados por un bíker conocedor de la zona que nos acompañó, lo fuimos cambiando sobre la marcha. En cualquier caso comenzamos recorriendo el camino tradicional que une Rabanillo con Quintana, tres kilómetros con pequeños sube y bajas atravesando robledales.
Colmenero de Cerdillo. |
Bosque de robles en el camino de San Ciprián. |
Molinos de San Ciprián. |