El viento iba a soplar de oeste, así que nuestra ruta debía ir en esa dirección y así sufrir en el camino de ida, cuando se está más fuerte, y volver empujados por él. Pero eso era lo que indicaban las previsiones el viernes, cuando preparamos la ruta. Esta mañana había rolado algo y venía del suroeste, mala suerte, pero con lo que no contábamos era con el barro, y lo había en abundancia...
12 de noviembre de 2023
23 de octubre de 2023
De recta en recta
Hay salidas en bici preciosas y otras que podríamos calificar como de trámite porque las circunstancias casí, casí, que obligaban a que fuera así. Había llovido mucho durante la semana y había que rodar por zonas donde no hubiera barro. Se nos ocurrió que yendo a Piedrahíta de Castro podríamos librarnos de él y casi, casi, lo conseguimos. Por lo demás, lo dicho, de trámite.
26 de febrero de 2023
En busca de nieve..., encontramos barro
20 de junio de 2021
Sin pena ni gloria...
La frustración suele aparecer tras una ilusión no cumplida. Hoy hemos sufrido cierta frustración porque íbamos a realizar una ruta larga que nos iba a llevar hasta un lugar en el que nunca habíamos estado, el mirador del Esla Castil de la Cabra. En su lugar, debido a la lluvia, hemos hecho una sin pena ni gloria.
1 de enero de 2021
Una de trámite para empezar el año
Después de las copiosas cenas de Nochevieja una buena forma de empezar el año es rodando en la bici un par de horitas, en plan tranquilo, sin madrugar... Ese fue nuestro propósito, después algunos factores lo complicaron todo un poco, pero aún así conseguimos quemar parte de esas cenas y pasar un buen rato.
20 de diciembre de 2020
Coreses, Algodre, Gallegos, Benegiles... y mucho barro
Lo que podría haber sido una etapa cómoda, para rodar y disfrutar terminó por tener un protagonista: el barro. Nos acompañó, bastante más de lo esperado, todo el camino, pero poco antes de Molacillos se cubrió de gloria y nos rompió la ruta. Es lo que tiene salir en bici en esta época, ya sabemos a lo que nos arriesgamos, y es que no estamos de acuerdo con el dicho "las bicis son para el verano", así que de vez en cuando hay que pagar las consecuencias.
15 de noviembre de 2020
Sorprendidos por el barro
Esta mañana sabíamos que no íbamos a encontrar caminos secos y polvorientos, imaginábamos que algún rastro de humedad tendrían, pero lo que no imaginábamos es que íbamos a estar peleándonos con el barro a lo largo de toda la ruta. La única explicación que encontramos para justificar la presencia de tanto es que por la zona por la que se desarrolló nuestro recorrido debió llover mucho ayer o esta noche. Por eso ese barro nos sorprendió y condicionó todo.
9 de diciembre de 2019
Lección de barro
Cuando salimos a las 9.30, los cinco que formábamos el grupo imaginábamos que barro íbamos a tener, porque el otoño ha sido muy lluvioso y en los últimos días había llovido bastante, pero la verdad es que no esperábamos tanto, ni tan molesto.
Los primeros kilómetros los hicimos sin problema, primero bordeando el río, después cruzando el Puente de Piedra, para seguir por el barrio de Cabañales y terminando en la rotonda del Cementerio. Allí continuamos por el llamado carril bici Zamora-Morales, pero al llegar a la zona de El Cristo lo abandonamos, pasamos junto a la ermita para rodar después por la vía de servicio y seguir por la carretera los últimos metros antes de llegar a esa localidad.
14 de enero de 2018
Por la Tierra del Vino, para no pisar barro
La ruta la iniciamos cinco bíkers en la Ciudad Deportiva. Nos dirigimos al estadio Ruta de la Plata y allí cogimos el carril bici hacia Morales.
Poco antes de llegar a la ermita del Cristo de Morales nos estaba esperando el sexto bíker. Ya todos juntos continuamos hasta Morales por la vía de servicio y el último tramo, desde la rotonda, por la N-630.
Atravesamos el pueblo y tomamos el camino de Pontejos. En este tramo, por fin, empezamos a ver campos verdes, algo imposible de ver hasta ahora por la sequía, y fueron un regalo para la vista.
Desde Pontejos fuimos a Cazurra y desde Cazurra a Peleas de Abajo. En ambos tramos no hubo barro, algún charco, pero nada más.
Antes de llegar a esta localidad el camino nos dejó en la carretera y por ella seguimos y continuamos por ella para dirigirnos a Jambrina. Aquí nos dimos el primer calentón de la mañana, porque la carretera tiene una pendiente considerable. Y como después de una buena subida suele haber una estupenda bajada, descendimos hasta Jambrina.
Cruzamos esta localidad de lado a lado para salir de ella con dirección a Gema, también por carretera local (nos cruzamos un coche en todo el tramo).
Ya en Gema hicimos una pequeña parada junto a la iglesia para meter algo en el estómago que repercutiera en las piernas.
Tras el pequeño receso proseguimos, ahora con dirección a Bamba, por la carretera-camino que une ambas localidades. Pasamos por este pueblo y a la salida nos dimos de frente con El Viso, y ya allí empezó la cantinela de siempre: A que no subimos... Y claro, quién se resiste...
Así que pocos minutos después allí estábamos con nuestros corazones desbocados y preguntándonos qué necesidad había de ello y por qué sufrir innecesariamente.
Cada uno a su ritmo llegamos todos a la cumbre, disfrutamos brevemente de las vistas e iniciamos el descenso.
Continuamos hacia Madridanos y, después de atravesar la calle principal, nos dimos de bruces con el GR-14 al que nos incorporamos para rodar por él hasta Villaralbo, sin más novedad que lo hicimos a un ritmo bastante fuerte y que, en un momento dado, tuvimos un público animado y entregado a darnos ánimo.
Después de cruzar esta localidad continuamos hacia Zamora por el itinerario habitual, primero por el Camino del río y después por el camino asfaltado que termina en Pinilla. Cruzamos el río por el puente de la autovía y como pasábamos por Cambalache, no nos quedó otra que parar a tomar una caña...
Relive 'Morning Jan 14th'
5 de noviembre de 2017
¡Por fin pisamos barro! ¡...Y nos hartamos de él!
Pero antes de llegar al Brocal de las Promesas el barro se volvió arcilloso, empezó a pegarse a nuestras ruedas hasta que llegó a bloquearlas, y en esos momentos empezamos a maldecirlo. Y es que ese tramo era intransitable, nada más ver cómo estaba debimos darnos la vuelta, pero somos muy brutos y caemos una y otra vez en la misma piedra, y además nos esperaba un bíker unos cientos de metros más allá, así que continuamos con la bici a cuestas o con ella en la mano arrancando los mazacotes de barro cada vez que impedían que la rueda girase.
Ya en el Brocal de las Promesas limpiamos lo que pudimos y decidimos abandonar la ruta que íbamos a hacer, para desde allí ir hacia Morales para lavar allí y al menos quitar el barro de las transmisiones y amortiguadores.
Tras el lavado improvisamos una ruta. En principio rodamos hacia Pontejos, y desde Pontejos continuamos hacia Casaseca de las Chanas. Los caminos por esta zona estaban húmedos pero sin barro arcilloso, las ruedas se frenaban algo pero se rodaba sin más problemas.
Desde Casaseca proseguimos hacia Moraleja del Vino, este tramo por carretera. Al llegar paramos en la plaza a almorzar y decidimos seguir hasta Gema del Vino recorriendo un tramo de camino muy propio del otoño.
Sin llegar a entrar en esta localidad seguimos rodando hacia Pontejos de nuevo adonde llegamos sin mayor dificultad y desde este pueblo ya nos dirigimos a Morales.
Allí perdimos a un efectivo, pero para despedirse se empeñó en que nos hidratáramos y comiéramos un poquito para hacer mejor el regreso y así lo hicimos.Ya con renovadas energías salimos hacia Zamora por el carril bici adonde llegamos en un plis plas.